El PSOE
tiene la costumbre de tirar la piedra y esconder la mano, una forma de mentir
como otra cualquiera. Nos acusan a la CNT de que nuestra lucha por la libertad
sindical y por la readmisión de dos compañeros del sindicato propició su
derrota electoral. Se obvia el detalle de que el motivo de nuestra lucha es,
precisamente, la persecución que sufre nuestro sindicato y sus militantes en la
empresa que presta el servicio de recogida de basuras y limpieza viaria al
Ayuntamiento. Y de que, en esta lucha, este partido que se llama obrero se
posicionó del lado de la empresa, en contra de los trabajadores y, por
añadidura, en contra de la libertad sindical, posicionamiento anti CNT que
viene desde antiguo, habida cuenta de que el PSOE se situó al lado
de la dictadura fascista del General Primo de Rivera en contra de la libertad y
de la propia clase obrera, dictadura que persiguió a la CNT.
Es posible
que amigos y familiares de los trabajadores perseguidos cambiaran su voto,
indignados por el trato que recibieron por parte del equipo de gobierno del
PSOE. Son muchos los desatinos que cometieron “los socialistas” en sus años en
el gobierno municipal, muy crecidos ante la perspectiva de que siempre
ostentarían el poder. Aún así, en lugar de reconocer su responsabilidad, echan
balones fuera. El cambio en el sentido del voto no se debe a ninguna petición o
posicionamiento de CNT, pues, conocedores de lo que son los políticos, no hemos
pedido el voto para nadie, antes bien, hemos preconizado la abstención. No nos
consideramos borregos que cada cuatro años eligen quien los lleve al matadero.
Tras ganar
las elecciones el PP nos prometió la readmisión de nuestros compañeros, y por
eso, confiando en la palabra no de un político, sino en la palabra de José
Fidel, un vecino del pueblo, hemos dejado latente el conflicto con STV y el
Ayuntamiento, pero lamentablemente vemos que el PP de Pilar de la Horadada, al
igual que el PSOE, miente y sigue el camino de sus lideres nacionales:
“prometer hasta meter, y una vez metido, nada de lo prometido”. Como nos temimos,
todo sigue igual, por lo que nos estamos viendo obligados a reabrir el
conflicto con la misma determinación y crudeza en la lucha por los compañeros y
por el derecho a la libre sindicación, no para que nadie gane las elecciones.
“PSOE y PP
LA MISMA MIERDA ES”, dice un lema cada vez más repetido. Lo vemos muy claro en
algo que nos afecta a todos los ciudadanos: por poner un ejemplo, vamos a
hablar de la salud. El PSOE se rasga las vestiduras por la privatización de la
sanidad que esta impulsando el PP, olvidando que el PP está convirtiendo la
sanidad en un negocio gracias a una ley, la Ley 15/97 de Nuevas Formas de
Gestión en la Sanidad, aprobada con los votos a favor del PSOE, PP, PNV, CiU y
CC; unos por otros nos van a matar. Ambos partidos quieren la sanidad privada,
que no es otra cosa que convertir la sanidad y el bienestar de todos en un
negocio. Pero negocio para las empresas y para los políticos que se colocan en
esas empresas.
Son
innumerables los adjetivos con los que se puede calificar la intervención del
concejal Armentreros en el Pleno del Ayuntamiento de Pilar de la Horadada. Y
por supuesto ninguno bueno. Lo mismo se puede decir de los medios de
desinformación del pueblo, que tras haber atacado al equipo de gobierno
socialista, ahora se ponen de su lado, ¿por algún interés económico quizás? Y
con este fin repiten una y otra vez la intervención de Armenteros en la que
intenta desacreditarnos como afines al PP. Estos medios nunca se han interesado
por algo que sí es noticia política: el ataque en Pilar de la Horadada a la
libertad sindical, derecho fundamental reconocido en la Constitución. Y es
noticia no solo política sino también social, por el apoyo de los vecinos que
han recibido los trabajadores perseguidos por sus ideas. Este apoyo transciende
la territorialidad del municipio, y así nos lo han venido demostrando día tras
día los compañeros de otros muchos lugares: Murcia, San Javier, Cartagena,
Lorca, Yecla, Alicante, Elche, Sevilla, Córdoba, Bilbao, Valencia…
Pueden
seguir con sus intentos de difamación. La historia de la CNT-AIT esta ahí,
siempre fiel a la clase obrera, y jalonada de persecuciones y de intentos de
desprestigio por parte de los vendidos al capitalismo, que antes o después han
ido quedando al descubierto.
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